Publicaciones etiquetadas con: Abuela

POPOL VUH Segunda Parte Capitulo II

Condiciones de © al final.

HÉROES GEMELOS DEL POPOL VUH Rivera-trials-of-the-hero-twins

HÉROES GEMELOS DEL POPOL VUH Rivera-trials-of-the-hero-twins

POPOL VUH

Traducido por Francisco Ximénez

 Notas de Adrián Recinos

Continuación de:

https://2012profeciasmayasfindelmundo.wordpress.com/2013/04/30/popol-vuh-segunda-parte-capitulo-i/ 

Al decir de muchos expertos, la versión en español del Popol Vuh de Adrián Recinos es la mejor (hay muchas versiones en varios idiomas), esa versión es la que presento aquí, con sus notas al final y numeradas.

Las imágenes no pertenecen al Popol Vuh, sólo son ilustrativas.

Voy a publicar el Popol Vuh dividido en varios posts, para que sean más cortos y fáciles de leer. Antes que éste, te recomiendo leer:

http://serunserdeluz.wordpress.com/2012/02/27/popol-vuh-historia-del-libro-y-fragmento/

https://2012profeciasmayasfindelmundo.wordpress.com/2012/02/27/popol-vuh-fragmento-e-historia-del-libro/

POPOL VUH

Segunda Parte Capitulo II

Popol Vuh portada de libro

Popol Vuh portada de libro

 

En seguida fue la venida de los mensajeros de Hun-Camé y Vucub-Camé.

-Id, les dijeron, Ahpop Achih,9 id a llamar a Hun-Hunahpú y Vucub-Hunahpú. «Venid con nosotros», les diréis. «Dicen los Señores que vengáis.» Que vengan aquí a jugar a la pelota con nosotros, para que con ellos se alegren nuestras caras, porque verdaderamente nos causan admiración. Así, pues, que vengan, dijeron los Señores. Y que traigan acá sus instrumentos de juego, sus anillos, sus guantes, y que traigan también sus pelotas de caucho, dijeron los Señores. «Venid pronto, les diréis», les fue dicho a los mensajeros.

Y estos mensajeros eran buhos: Chabi-Tucur, Huracán-Tucur, Caquix-Tucur y Holom-Tucur,10 Así se llamaban los mensajeros de Xibalbá.

Chabi-Tucur era veloz como una flecha; Huracán-Tucur tenía solamente una pierna; Caquix-Tucur tenía la espalda roja, y Holom-Tucur solamente tenía cabeza, no tenía piernas, pero sí tenía alas.

Los cuatro mensajeros tenían la dignidad de Ahpop-Achih. Saliendo de Xibalbá llegaron rápidamente, llevando su mensaje, al patio donde estaban jugando a la pelota Hun-Hunahpú y Vucub-Hunahpú, en el juego de pelota que se llamaba Nim Xob Carchah.11 Los buhos mensajeros se dirigieron al juego de la pelota y presentaron su mensaje, precisamente en el orden en que se lo dieron Hun-Camé, Vucub-Camé, Ahalpuh, Ahalganá, Chamiabac, Chamiaholom, Xiquiripat, Cuchumaquic, Ahalmez, Ahaltocob, Xic y Patán, que así se llamaban los Señores que enviaban su recado por medio de los buhos.

-¿De veras han hablado así los Señores Hun-Camé y Vucub-Camé? -Ciertamente han hablado así, y nosotros os tenemos que acompañar.

-“Que traigan todos sus instrumentos para el juego”, han dicho los Señores.

-Está bien, dijeron los jóvenes. Aguardadnos, sólo vamos a despedimos de nuestra madre.

Y habiéndose dirigido hacia su casa, le dijeron a su madre, pues su padre ya era muerto: -Nos vamos, madre nuestra, pero en vano será nuestra ida. Los mensajeros del Señor han venido a llevarnos. “Que vengan” han dicho, según manifiestan los enviados.

-Aquí se quedará en prenda nuestra pelota, agregaron. En seguida la fueron a colgar en el hueco que hacía el techo de la casa. Luego dijeron: -Ya volveremos a jugar. Y dirigiéndose a Hunbatz y Hunchouén les dijeron:

A molded ceramic Maya ballplayer figurine in t...

A molded ceramic Maya ballplayer figurine in the Jaina Island style that also, like many of these figurines, functions as a whistle. 600-900 AD. (Photo credit: Wikipedia)

Cerámica de un jugador de pelota maya de la Isla de Jaina

-Vosotros ocupaos de tocar la flauta y de cantar, de pintar, de esculpir; calentad nuestra casa y calentad el corazón de vuestra abuela.

Cuando se despidieron de su madre, se enterneció Ixmucané y echó a llorar. -No os aflijáis, nosotros nos vamos, pero todavía no hemos muerto, dijeron al partir Hun-Hunahpú y Vucub-Hunahpú.

En seguida se fueron Hun-Hunahpú y Vucub-Hunahpú y los mensajeros los llevaban por el camino. Así fueron bajando por el camino de Xibalbá, por unas escaleras muy inclinadas. Fueron bajando hasta que llegaron a la orilla de un río que corría rápidamente entre los barrancos llamados Un zivan cul y Cuzivan,12 y pasaron por ellos. Luego pasaron por el río que corre entre jícaros espinosos. Los jícaros eran innumerables, pero ellos pasaron sin lastimarse.

cuevas de Hang Son Doong, en Vietnam Foto por HO:Facebook:Oxalis Adventure Tours 5

cuevas de Hang Son Doong, en Vietnam Foto por HO:Facebook:Oxalis Adventure Tours 5

Luego llegaron a la orilla de un río de sangre y lo atravesaron sin beber sus aguas; llegaron a otro río solamente de agua y no fueron vencidos. Pasaron adelante hasta que llegaron a donde se juntaban cuatro caminos y allí fueron vencidos, en el cruce de los cuatro caminos.

De estos cuatro caminos, uno era rojo, otro negro, otro blanco y otro amarillo. Y el camino negro les habló de esta manera: -Yo soy el que debéis tomar porque yo soy el camino del Señor. Así habló el camino.

Y allí fueron vencidos. Los llevaron por el camino de Xibalbá y cuando llegaron a la sala del consejo de los Señores de Xibalbá, ya habían perdido la partida.

Ahora bien, los primeros que estaban allí sentados eran solamente muñecos, hechos de palo, arreglados por los de Xibalbá.

A éstos los saludaron primero:

-¿Cómo estáis, Hun-Camé?, le dijeron al muñeco.

-¿Cómo estáis, Vucub-Camé?, le dijeron al hombre de palo. Pero éstos no les respondieron. Al punto soltaron la carcajada los Señores de Xibalbá y todos los demás Señores se pusieron a reír ruidosamente, porque sentían que ya los habían vencido, que habían vencido a Hun-Hunahpú y Vucub-Hunahpú. Y seguían riéndose.

Luego hablaron Hun-Camé y Vucub-Camé: -Muy bien, dijeron. Ya vinisteis. Mañana preparad la máscara, vuestros anillos y vuestros guantes, les, dijeron.

-Venid a sentaros en nuestro banco, les dijeron. Pero el banco que les ofrecían era de piedra ardiente y en el banco se quemaron. Se pusieron a dar vueltas en el banco, pero no se aliviaron y si no se hubieran levantado se les habrían quemado las asentaderas.

Los de Xibalbá se echaron a reír de nuevo, se morían de la risa; se retorcían del dolor que les causaba la risa en las entrañas, en la sangre y en los huesos, riéndose todos los Señores de Xibalbá.

-Idos ahora a aquella casa, les dijeron; allí se os llevará vuestra raja de ocote 13 y vuestro cigarro y allí dormiréis.

En seguida llegaron a la Casa Oscura. No había más que tinieblas en el interior de la casa.

Mientras tanto, los señores de Xibalbá discurrían lo que debían hacer.

-Sacrifiquémoslos mañana, que mueran pronto, pronto, para que sus instrumentos de juego nos sirvan a nosotros para jugar, dijeron entre sí los Señores de Xibalbá.

Ahora bien, su ocote era una punta redonda de pedernal del que llaman zaquitoc; éste es el pino de Xíbalbá. Su ocote era puntiagudo y afilado y brillante como hueso; muy duro era el pino de los de Xibalbá.

Hun-Hunahpú y Vucub-Hunahpú entraron a la Casa Oscura. Allí fueron a darles su ocote, un solo ocote encendido que les mandaban Hun-Camé y Vucub-Camé, junto con un cigarro para cada uno, encendido también, que les mandaban los Señores. Esto fueron a darles a Hun-Hunahpú y Vucub-Hunahpú.

Estos se hallaban en cuclillas en la oscuridad cuando llegaron los portadores del ocote y los cigarros. Al entrar, el ocote alumbraba brillantemente.

-Que enciendan su ocote y sus cigarros cada uno; que vengan a devolverlos al amanecer, pero que no los consuman, sino que los devuelvan enteros; esto es lo que os mandan decir los Señores. Así les dijeron. Y así fueron vencidos. Su ocote se consumió, y asimismo se consumieron los cigarros que les habían dado.

Los castigos de Xibalbá eran numerosos; eran castigos de muchas maneras.

El primero era la Casa Oscura, Quequma-ha, en cuyo interior sólo había tinieblas.

Son Doong Cave, Vietnam  Edward Longstreet

Son Doong Cave, Vietnam Edward Longstreet

El segundo la Casa donde tiritaban, Xuxulim-ha, dentro de la cual hacía mucho frío. Un viento frío e insoportable soplaba en su interior.

El tercero era la Casa de los tigres, Balami-ha, así llamada, en la cual no había más que tigres que se revolvían, se amontonaban, gruñían y se mofaban. Los tigres estaban encerrados dentro de la casa.

Zotzi-ha, la Casa de los murciélagos, se llamaba el cuarto lugar de castigo. Dentro de esta casa no había más que murciélagos que chillaban, gritaban y revoloteaban en la casa. Los murciélagos estaban encerrados y no podían salir.

El quinto se llamaba la Casa de las Navajas, Chayin-ha,14 dentro de la cual solamente había navajas cortantes y afiladas, calladas o rechinando las unas con las otras dentro de la casa.

Muchos eran los lugares de tormento de Xibalbá; pero no entraron en ellos Hun-Hunahpú y Vucub-Hunahpú. Solamente mencionamos los nombres de estas casas de castigo.

Cuando entraron Hun-Hunahpú y Vucub-Hunahpú ante Hun-Camé y Vucub-Camé, les dijeron éstos:

-¿Dónde están mis cigarros? ¿Dónde está mi raja de ocote que os dieron anoche?

-Se acabaron, Señor.

-Está bien. Hoy será el fin de vuestros días.

Ahora moriréis. Seréis destruidos, os haremos pedazos y aquí quedará oculta vuestra memoria. Seréis sacrificados, dijeron Hun-Camé y Vucub-Camé.

En seguida los sacrificaron y los enterraron en el Pucbal-Chah, así llamado. Antes de enterrarlos le cortaron la cabeza a Hun-Hunahpú y enterraron al hermano mayor junto con el hermano menor.

-Llevad la cabeza y ponedla en aquel árbol que está sembrado en el camino, dijeron Hun-Camé y Vucub-Camé. Y habiendo ido a poner la cabeza en el árbol, al punto se cubrió de frutas este árbol que jamás había fructificado antes de que pusieran entre sus ramas la cabeza de Hun-Hunahpú. Y a esta jícara la llamamos hoy la cabeza de Hun-Hunahpú, que así se dice.

Con admiración contemplaban Hun-Camé y Vucub-Camé el fruto del árbol. El fruto redondo estaba en todas partes; pero no se distinguía la cabeza de Hun-Hunahpú; era un fruto igual a los demás frutos del jícaro. Así aparecía ante todos los de Xibalbá cuando llegaban a verla.

A juicio de aquéllos, la naturaleza de este árbol era maravillosa, por lo que había sucedido en un instante cuando pusieron entre sus ramas la cabeza de Hun-Hunahpú. Y los Señores de Xibalbá ordenaron: – ¡Que nadie venga a coger de esta fruta! i Que nadie venga a ponerse debajo de este árbol!, dijeron, y así dispusieron impedirlo todos los de Xibalbá.

La cabeza de Hun-Hunahpú no volvió a aparecer, porque se había vuelto la misma cosa que el fruto del árbol que se llama jícaro. Sin embargo, una muchacha oyó la historia maravillosa. Ahora contaremos cómo fue su llegada.

Notas de Adrián Recinos:

9 ~ Título de algunos de los Señores y jefes quichés.

10 ~ Chabi-Tucur, Buho flecha; Huracán-Tucur, Buho de una pierna, o Buho gigante; Caquix-Tucur, Buho guacamaya; Holoni-Tucur, Cabeza de buho, o Buho que se distinguía por la cabeza. Tucur es el nombre quiché del buho. Así se llama también un pueblo de la Verapaz, San Miguel Tucurú. Esta ave nocturna es conocida indistintamente en Guatemala con el nombre de tucurú y con el de tecolote, del náhuatl tecolotl.

11 ~ La gran Carchah, centro importante de población en la Verapaz, región en donde parecen haber localizado los quichés los hechos mitológicos del Popol Vuh. En el Manuscrito cakchiquel se lee que éstos y los quichés fueron a poblar a Subinal, al medio de Chacachil, al medio de Nimxor, al medio de Moinal, al medio de Carchah (nicah Carchah). Algunos de estos lugares conservan sus nombres antiguos y pueden identificarse fácilmente en la región de la Verapaz. Según el documento cakchiquel, Nim Xor y Carchah eran dos sitios diferentes.

12 ~ Nu zivan cut, mi barranco o el barranco angosto. Cu Zivan, barranco angosto, estrecho. Zivan es barranco, pero se llama así también a las cuevas subterráneas en Verapaz y el Petén; son los siguanes del lenguaje corriente. Los datos topográficos que suministra este capítulo y las indicaciones que se encuentran en otros lugares de esta Segunda Parte demuestran que los antiguos quichés tenían ideas bastante precisas sobre la localización del reino de Xibalbá, donde habitaban unos jefes sanguinarios y despóticos a quienes aquéllos estuvieron sujetos en los tiempos mitológicos. En el presente capítulo se señala, como punto de partida del camino de Xibalbá, el gran pueblo de Carchá que existe todavía a pocos kilómetros de Cobán, la capital del departamento de la Alta Verapaz. Saliendo de Carchá el camino bajaba «por unas escaleras muy inclinadas» hasta llegar a los barrancos o siguanes, entre los cuales corría un río precipitadamente; es decir, descendían de las montañas del interior hasta las tierras bajas del Petén, a los dominios de los itzaes. Al final de esta Segunda Parte se dice que los de Xibalbá eran los Ah-Tza, los Ah-Tucur, los malos, los buhos. Estas palabras, sin embargo, pueden leerse también como «los de Itzá» (Petén) y «los de Tucur», o sea Tecolotlán, la tierra de los buhos (la Verapaz). Son las dos regiones del norte de Guatemala, muy conocidas en el mundo antiguo, hasta donde los quichés no pudieron extender sus conquistas. Estos nombres confirman las indicaciones topográficas del texto. Las tribus que en tiempos relativamente recientes llegaron a establecerse en las montañas del interior de Guatemala tenían sin duda alguna creencia de que el norte del territorio estaba poblado por sus viejos enemigos, los mismos que en épocas anteriores disponían de las vidas de sus antepasados. Esos habitantes del norte eran los mayas del Viejo Imperio, una de cuyas ramas, la de los itzaes, fue la última en rendirse a los españoles en los años finales del siglo xvii. Otros datos dispersos en el Popol Vuh revelan que Xibalbá era un lugar profundo, subterráneo, un abismo desde el cual había que subir para llegar a la tierra; pero el propio documento quiché explica que los Señores de Xibalbá no eran dioses, ni eran inmortales, que eran falsos de corazón, hipócritas, envidiosos y tiranos. Que no eran invencibles se demuestra en el curso de la narración.

13 ~ Chah en quiché, ocotl en lengua mexicana, pino resinoso que usan los indios para alumbrarse.

14 ~ Chay, obsidiana, sustancia vidriosa, piedra volcánica negra, la «piedra de rayo» de los campesinos, de la cual desprendían los indios pequeñas hojas cortantes que usaban como cuchillos o navajas y puntas de flecha.

_______________

Tomado de:

http://pueblosoriginarios.com/textos/popol/22.html

_______________

ENLACES SOBRE EL POPOL VUH

http://serunserdeluz.wordpress.com/2013/03/18/popol-vuh-otra-version-mito-de-la-creacion-resumido/

.

https://2012profeciasmayasfindelmundo.wordpress.com/2014/03/21/popol-vuh-fragmento-e-historia-del-libro/

.

https://2012profeciasmayasfindelmundo.wordpress.com/2014/01/02/el-diluvio-en-el-popol-vuh/

.

https://2012profeciasmayasfindelmundo.wordpress.com/2013/04/30/popol-vuh-segunda-parte-capitulo-i/

.

https://2012profeciasmayasfindelmundo.wordpress.com/2013/08/12/popol-vuh-version-del-profesor-georges-raynaud/

.

https://2012profeciasmayasfindelmundo.wordpress.com/2013/03/03/popol-vuh-eran-extraterrestres-los-dioses-mayas/

.

_______________

Sígueme en Twitter

Seguir a @serunserdeluz

© Silvia Eugenia Ruiz Bachiller

Puedes copiar y publicar este artículo, siempre y cuando no lo uses con fines comerciales, no lo modifiques, no quites el © ni este último párrafo que le sigue, enlaces incluidos.

También visítame en

http://serunserdeluz.wordpress.com/

http://aquevineadondevoy.wordpress.com/  

Categorías: alegorías, ANTROPOLOGÍA, culturas, HISTORIA, MAYAS, MÉXICO PREHISPÁNICO, POPOL VUH, Uncategorized | Etiquetas: , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , | 8 comentarios

POPOL VUH (FRAGMENTO, LA CREACIÓN) versión del profesor Georges Raynaud

Condiciones de (c) al final

.

 Querid@ lector@, si buscas el Popol Vuh, te vas a encontrar con infinidad de versiones, algunas traducidas de quiché al español antiguo, luego a otros idiomas (alemán, francés, inglés) y de ahí de nuevo al español, no es raro que sean diferentes en la forma, sin embargo, el fondo del mensaje se conserva en la mayoría de ellas.

 

The oldest written account of Popol Vuh (ms c....

The oldest written account of Popol Vuh (ms c.1701 by Francisco Ximénez, O.P.) (Photo credit: Wikipedia)

Para ver la historia del libro del Popol Vuh:

 http://serunserdeluz.wordpress.com/2012/02/27/popol-vuh-historia-del-libro-y-fragmento/

 

Después de las que ahí se  mencionan, hubo otra versión francesa, la del profesor Georges Raynaud, que la realizó  con rigor científico, ajustándola al texto del padre Ximénez (segunda versión) y sus alumnos de  la Escuela de Altos Estudios de París, el mexicano J. M. González de Mendoza y el guatemalteco Miguel Ángel Asturias, lo tradujeron al español, bajo la dirección del profesor Raynaud y la publicaron en París, en 1927, con el título de «Los Dioses, los Héroes y los Hombres de Guatemala Antigua».

Un fragmento de esa versión es la que te presento aquí:

 

Tomada de:

61508637-popol-vuh

 POPOL VUH

(Fragmento)

 

“Aquí comenzaremos la antigua historia llamada Quiché. Aquí escribiremos, comenzaremos el antiguo relato del principio, del origen, de todo lo que hicieron en la ciudad Quiché los hombres de las tribus Quiché. Aquí recogeremos la declaración, la manifestación, la aclaración de lo que estaba escondido, de lo que fue iluminado por los Constructores, los Formadores, los Procreadores, los Engendradores; sus nombres: Maestro Mago del Alba, Maestro Mago del Día [Gran Cerdo del Alba], Gran Tapir del Alba, Dominadores, Poderosos del Cielo, Espíritus de los Lagos, Espíritus del Mar, Los de la Verde Jadeita, Los de la Verde Copa; así decíase. Rogábase con ellos, invocábase con ellos, a los llamados Abuela, Abuelo, Antiguo Secreto, Antigua Ocultadora, Guarda Secreto, Ocul-tadora, Abuela [que forma parte] de la Pareja [Mágica de Abuelos], Abuelo de la [misma] Pareja. Así está dicho en la historia Quiché todo lo que ellos dijeron, lo que ellos hicieron, en el alba de la vida, en el alba de la historia. Pintaremos [lo que pasó] antes de la Palabra de Dios, antes del Cristianismo: lo reproduciremos porque no se tiene [ya más] la visión del Libro del Consejo , la visión del alba de la llegada de ultramar, de nuestra [vida en la] sombra 3, la visión del alba de la vida, como se dice.

Este libro es el primer libro, pintado antaño, pero su faz está oculta [hoy] al que ve, al pensador. Grande era la exposición, la historia de cuando se acabaron de medir todos los ángulos del cielo, de la tierra, la cuadrangulación, su medida, la medida de las líneas, en el cielo, en la tierra, en los cuatro ángulos, de los cuatro rincones 4, tal como había sido dicho por los Constructores, los Formadores, las Madres, los Padres de la vida, de la existencia, los de la Respiración, los de las Palpitaciones, los que engendran, los que piensan. Luz de las tribus, Luz de los hijos, Luz de la prole 6, Pensadores y Sabios, [acerca de] todo lo que está en el cielo, en la tierra, en los lagos, en el mar. He aquí el relato de cómo todo estaba en suspenso, todo tranquilo, todo inmóvil, todo apacible, todo silencioso, todo vacío, en el cielo, en la tierra. He aquí la primera historia, la primera descripción.

No había un solo hombre, un solo animal, pájaro, pez, cangrejo, madera, piedra, caverna, barranca, hierba, selva. Sólo el cielo existía. La faz de la tierra no aparecía; sólo existían la mar limitada, todo el espacio del cielo. No había nada reunido, junto. Todo era invisible, todo estaba inmóvil en el cielo. No existía nada edificado. Solamente el agua limitada, solamente la mar tranquila, sola, limitada. Nada existía. Solamente la inmovilidad, el silencio, en las tinieblas, en la noche 7. Sólo los Constructores, los Formadores, los Dominadores, los Poderosos del Cielo, los Procreadores, los Engendradores, estaban sobre el agua, luz esparcida. [Sus símbolos] estaban envueltos en las plumas, las verdes; sus nombres [gráficos]eran, pues, Serpientes Emplumadas (Quetzalcóatl/Kukulkán). Son grandes Sabios 9. Así es el cielo, [así] son también los Espíritus del Cielo; tales son, cuéntase, los nombres de los dioses.

Entonces vino la Palabra 10; vino aquí de los Dominadores, de los Poderosos del Cielo, en las tinieblas, en la noche: fue dicha por los Dominadores, los Poderosos del Cielo; hablaron: entonces celebraron consejo, entonces pensaron, se comprendieron, unieron sus palabras, sus sabidurías. Entonces se mostraron, meditaron, en el momento del alba; decidieron [construir] al hombre, mientras celebraban consejo sobre la producción, la existencia, de los árboles, de los bejucos, la producción de la vida, de la existencia, en las tinieblas, en la noche, por los Espíritus del Cielo llamados Maestros Gigantes. Maestro Gigante Relámpago es el primero. Huella del Relámpago es el segundo. Esplendor del Relámpago es el tercero: estos tres son los Espíritus del Cielo. Entonces se reunieron con ellos los Dominadores, los Poderosos del Cielo. Entonces celebraron consejo sobre el alba de la vida, cómo se haría la germinación, cómo se haría el alba, quién sostendría, nutriría 11. «Que eso sea. Fecundaos. Que esta agua parta, se vacíe. Que la tierra nazca, se afirme», dijeron. «Que la germinación se haga, que el alba se haga en el cielo, en la tierra, porque [no tendremos] ni adoración ni manifestación por nuestros construidos, nuestros formados, hasta que nazca el hombre construido, el hombre formado»: así hablaron, por lo cual nació la tierra Tal fue en verdad el nacimiento de la tierra existente. «Tierra», dijeron y en seguida nació. Solamente una niebla, solamente una nube [fue] el nacimiento de la materia. Entonces salieron del agua las montañas: al instante salieron las grandes montañas. Solamente por Ciencia Mágica, por el Poder Mágico, fue hecho lo que había sido decidido [concerniente a] los mentes, [a] las llanuras; en seguida nacieron simultáneamente en la superficie de la tierra los cipresales, los pinares.

Y los Poderosos del Cielo se regocijaron así: «Sed los bienvenidos, oh Espíritus del Cielo, oh Maestro Gigante [Relámpago], oh Huella del Relámpago, oh Esplendor del Relámpago». «Que se acabe nuestra construcción, nuestra formación», fue respondido. Primero nacieron la tierra, los montes, las llanuras; se pusieron en camino las aguas; los arroyos caminaron entre los montes; así tuvo lugar la puesta en marcha de las aguas cuando aparecieron las grandes montañas. Así fue el nacimiento de la tierra cuando nació por [orden] de los Espíritus del Cielo, de los Espíritus de la Tierra, pues así se llaman los que primero fecundaron, estando el cielo en suspenso, estando la tierra en suspenso en el agua; así fue fecundada cuando ellos la fecundaron: entonces su conclusión, su composición, fueron meditadas por ellos.

En seguida fecundaron a los animales de las montañas, guardianes de todas las selvas, los seres de las montañas: venados, pájaros, pumas, jaguares, serpientes, víboras, [serpientes] ganti, guardianes de los bejucos. Entonces los Procreadores, los Engendradores, dijeron: «¿No habrá más que silencio, inmovilidad, al pie de los árboles, de los bejucos? Bueno es, pues, que haya guardianes»; así dijeron, fecundando, hablando. Al instante nacieron los venados, los pájaros. Entonces dieron sus moradas a los venados, a los pájaros. «Tú, venado, sobre el camino de los arroyos, en las barrancas, dormirás; aquí vivirás, en las hierbas, en las malezas; en las selvas, fecundarás; sobre cuatro pies irás, vivirás». Fue hecho como fue dicho. Entonces fueron también [dadas] las moradas de los pajarillos, de los grandes pájaros. «Pájaros, anidaréis sobre los árboles, sobre los bejucos moraréis; engendraréis, os multiplicaréis sobre las ramas de los árboles, sobre las ramas de los bejucos». Así fue dicho a los venados, a los pájaros, para que hiciesen lo que debían hacer; todos tomaron sus dormitorios, sus moradas. Así los Procreadores, los Engendradores, dieron sus casas a los animales de la tierra. Estando pues todos terminados, venados, pájaros, les fue dicho a los venados, a los pájaros,  para que hiciesen lo que debían hacer; todos tomaron sus dormitorios, sus moradas.  Así los Procreadores, los Engendradores, dieron sus casas a los animales de la tierra. Estando pues todos terminados, venados, pájaros, les fue dicho a los venados, a los pájaros, por los Constructores, los Formadores, los Procreadores, los Engendradores: «Hablad, gritad; podéis gorjear, gritar. Que cada uno haga oír su lenguaje según su clan, según su manera». Así fue dicho a los venados, pájaros, pumas, jaguares, serpientes. «En adelante decid nuestros nombres, alabadnos, a nosotros vuestras madres, a nosotros vuestros padres. En adelante llamad a Maestro Gigante [Relámpago], Huella del Relámpago, Esplendor del relámpago, Espíritus del Cielo, Espíritus de la Tierra, Constructores. Formadores, Procreadores. Engendradores. Habladnos, invocadnos, adoradnos», se les dijo. Pero no pudieron hablar como hombres: solamente cacarearon, solamente mugieron, solamente graznaron; no se manifestó [ninguna] forma de lenguaje, hablando cada uno diferentemente. Cuando los Constructores, los Formadores, oyeron sus palabras impotentes, se dijeron unos a otros: «No han podido decir nuestros nombres, de nosotros los Constructores, los Formadores». «No está bien», se respondieron unos a otros los Procreadores, los Engendradores, y dijeron: «He aquí que seréis cambiados 12 porque no habéis podido hablar. Cambiaremos nuestra Palabra13. Vuestro sustento, vuestra alimentación, vuestros dormitorios, vuestras moradas, los tendréis: serán las barrancas, las selvas. Nuestra adoración es imperfecta si vosotros no nos invocáis. ¿Habrá, podrá haber adoración, obediencia, en los [seres] que haremos? Vosotros recibiréis vuestro fardo: vuestra carne será molida entre los dientes; que así sea, que tal sea vuestro fardo». Así les fue entonces dicho, ordenado, a los animalitos, a los grandes animales de la superficie de la tierra; pero éstos quisieron probar su suerte, quisieron tentar la prueba, quisieron probar la adoración, mas no entendiendo de ningún modo el lenguaje unos de otros, no se comprendieron, no pudieron hacer nada.

Tal fue, pues, el fardo de su carne; así el fardo de ser comidos, de ser matados, fue [impuesto] aquí sobre todos los animales de la superficie de la tierra. En seguida fueron ensayados seres construidos, seres formados 14, por los Constructores, los Formadores, los Procreadores, los Engendradores. «Que se pruebe todavía. Ya se acerca la germinación, el alba. Hagamos a nuestros sostenes, a nuestros nutridores. ¿Cómo ser invocados, conmemorados, en la superficie de la tierra? [Ya] hemos ensayado con nuestra primera construcción, nuestra formación, sin que por ella pueda hacerse nuestra adoración, nuestra manifestación. Probemos, pues, a hacer obedientes, respetuosos sostenes, nutridores», dijeron. Entonces fue la construcción, la formación.

De tierra hicieron la carne. Vieron que aquello no estaba bien, sino que se caía, se amontonaba, se ablandaba, se mojaba, se cambiaba en tierra, se fundía; la cabeza no se movía; el rostro [quedábase vuelto] a un solo lado; la vista estaba velada; no podían mirar detrás de ellos; al principio hablaron, pero sin sensatez. En seguida, aquello se licuó, no se sostuvo en pie15. Entonces los Constructores, los Formadores, dijeron otra vez: «Mientras más se trabaja, menos puede él andar y engendrar». «Que se celebre, pues, consejo sobre eso», dijeron. Al instante des-hicieron, destruyeron una vez más, su construcción, su formación, y después dijeron: «¿Cómo haremos para que nos nazcan adoradores, invocadores?» Celebrando consejo de nuevo, dijeron entonces: «Digamos a Antiguo Secreto, Antigua Ocultadora, Maestro Mago del Alba, Maestro Mago del Día: «Probad de nuevo la suerte, su formación»». Así se dijeron unos a otros los Constructores, los Formadores, y hablaron a Antiguo Secreto, Antigua Ocultadora. En seguida, el discurso dicho a aquellos augures, a la Abuela del Día, a la Abuela del Alba por los Constructores, los Formadores; he aquí sus nombres: Antiguo Secreto, Antigua Ocultadora. Y los Maestros Gigantes hablaron, así como los Dominadores, los Poderosos del Cielo. Dijeron entonces a Los de la Suerte, los de [su] Formación, a los augures: «Es tiempo de concertarse de nuevo sobre los signos de nuestro hombre construido, de nuestro hombre formado, como nuestro sostén, nuestro nutridor, nuestro invocador, nuestro conmemorador. Comenzad, pues, las Palabras [Mágicas], Abuela, Abuelo, nuestra abuela, nuestro abuelo, Antiguo Secreto, Antigua Ocultadora. Haced pues que haya germinación, que haya alba, que seamos invocados, que seamos adorados, que seamos conmemorados, por el hombre construido, el hombre formado, el hombre maniquí, el hombre moldeado. Haced que así sea. Declarad vuestros nombres: Maestro Mago del Alba, Maestro Mago del Día, Pareja Procreadora, Pareja Engendradora, Gran Cerdo del Alba, Gran Tapir del Alba. Los de las Esmeraldas. Los de las Gemas, Los del Punzón, Los de las Tablas, Los de la Verde Jadeita, Los de la Verde Copa, Los de la Resina, Los de los Trabajos Artísticos, Abuela del Día, Abuela del Alba. Sed llamados así por nuestros construidos, nuestros formados. Haced vuestros encantamientos por vuestro maíz, por vuestro tzité 16. ¿Se hará, acontecerá, que esculpamos en madera su boca, su rostro?» Así fue dicho a los de la Suerte. Entonces [se efectuó] el lanzamiento [de los granos], la predicción del encantamiento por el maíz, el tzité. «Suerte, fórmate», dijeron entonces una abuela, un abuelo. Ahora bien, este abuelo era El del Tzité, llamado Antiguo Secreto; esta abuela era La de la Suerte, la de [su] formación, llamada Antigua Ocultadora con Gigante Abertura. Cuando se decidió la suerte, se habló así: «Tiempo es de concertarse. Hablad; que oigamos y que hablemos, digamos, si es preciso que la madera sea labrada, sea esculpida por Los de la Construcción, Los de la  Formación, si ella será el sostén, el nutridor, cuando se haga la germinación, el alba». «Oh maíz, oh tzité, oh suerte, oh [su] formación, asíos, ajustaos»17, fue dicho al maíz, al tzité, a la suerte, a [su] formación. «Venid a picar ahí, oh Espíritus del Cielo 18. No hagáis bajar la boca, la faz19 de los Dominadores, de los Poderosos del Cielo», dijeron. Entonces dijeron la cosa recta: «Que así sean, así, vuestros maniquíes, los [muñecos] construidos de madera, hablando, charlando en la superficie de la tierra». —»Que así sea», se respondió a sus palabras. Al instante fueron hechos los maniquíes, los [muñecos] construidos de madera; los hombres se produjeron, los hombres hablaron; existió la humanidad en la superficie de la tierra. Vivieron, engendraron, hicieron hijas, hicieron hijos, aquellos maniquíes, aquellos [muñecos] construidos de madera. No tenían ni ingenio ni sabiduría, ningún recuerdo de sus Constructores, de sus Formadores; andaban, caminaban sin objeto. No se acordaban de los Espíritus del Cielo; por eso decayeron. Solamente un ensayo, solamente una tentativa de humanidad. Al principio hablaron, pero sus rostros se desecaron; sus pies, sus manos, [eran] sin consistencia; ni sangre, ni humores, ni humedad, ni grasa; mejillas desecadas [eran] sus rostros; secos sus pies, sus manos; comprimida su carne. Por tanto [no había] ninguna sabiduría en sus cabezas, ante sus Constructores, sus Formadores, sus Procreadores, sus Animadores. Éstos fueron los primeros hombres que existieron en la superficie de la tierra.

CONTINUARÁ CON UN DILUVIO, UNA CATÁSTROFE, LA MUERTE DE TODOS ESOS HOMBRES Y LA HISTORIA DEL GRAN GUACAMAYO.

***

POPOL VUH OTROS ENLACES

http://serunserdeluz.wordpress.com/2013/03/18/popol-vuh-otra-version-mito-de-la-creacion-resumido/

https://2012profeciasmayasfindelmundo.wordpress.com/2014/03/21/popol-vuh-fragmento-e-historia-del-libro/

http://serunserdeluz.wordpress.com/2012/02/27/popol-vuh-historia-del-libro-y-fragmento/

https://2012profeciasmayasfindelmundo.wordpress.com/2014/01/02/el-diluvio-en-el-popol-vuh/

https://2012profeciasmayasfindelmundo.wordpress.com/2013/04/30/popol-vuh-segunda-parte-capitulo-i/

https://2012profeciasmayasfindelmundo.wordpress.com/2013/09/18/popol-vuh-segunda-parte-capitulo-ii/

Si este enlace no se abre, por favor ve a  «ARCHIVOS» en la columna de la derecha y busca «septiembre de 2013», es el sexto post que aparece ahí, gracias.

.

https://2012profeciasmayasfindelmundo.wordpress.com/2013/08/12/popol-vuh-version-del-profesor-georges-raynaud/

https://2012profeciasmayasfindelmundo.wordpress.com/2013/03/03/popol-vuh-eran-extraterrestres-los-dioses-mayas/

***

Sígueme en Twitter

Seguir a @serunserdeluz

© Silvia Eugenia Ruiz Bachiller

Puedes copiar y publicar este artículo, siempre y cuando no lo uses con fines comerciales, no lo modifiques, no quites el © ni este último párrafo que le sigue, enlaces incluidos.

También visítame en

http://serunserdeluz.wordpress.com/

https://2012profeciasmayasfindelmundo.wordpress.com/about/

http://aquevineadondevoy.wordpress.com/

Categorías: alegorías, ANTROPOLOGÍA, ARQUEOLOGÍA, culturas, HISTORIA, MAGIA, MAR, MAYAS, MÉXICO PREHISPÁNICO, MITOS, mitos de la creación, POPOL VUH, QUETZALCÓATL, Uncategorized | Etiquetas: , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , | 11 comentarios

A %d blogueros les gusta esto: