© condiciones al final
QUIÉN Y POR QUÉ BAUTIZÓ A AMÉRICA
CON ESE NOMBRE?
LO QUE NO SABÍAS DE LA HISTORIA
El fundamento de la identidad es el nombre. La identidad se forma a partir de quiénes somos para diferenciarnos de los demás. Si nuestro propio nombre nos ha sido impuesto por un tercero, el que en un enfrentamiento resultó vencedor, tenemos un conflicto. Si, además, el origen de este nombre es fuente de contradicción y confusión, el problema es más grave. Entonces nosotros, en este continente tenemos un problema
AMÉRICA Y EL DÍA DE LA RAZA, 12 DE OCTUBRE
Según nos enseñaron en la escuela, el nombre del gran continente supuestamente descubierto por Cristóbal Colón el 12 de octubre de 1492, día en el que nos hacían «celebrar» el Día de la Raza» (y aún algunos aún lo hacen) fue dado en honor de un italiano llamado Américo Vespucio (o Vespucci)
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Más sobre el supuesto “descubrimiento” de América por Cristóbal Colón el 12 de octubre de 1492 en:
Sobre las consecuencias de ese «descubrimiento» para los habitantes de este continente
https://2012profeciasmayasfindelmundo.wordpress.com/2012/10/09/560/
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¿QUIÉN FUE AMÉRICO (AMERIGHO O ALBERICO) VESPUCIO?
La fama universal de Vespucio se debe a dos obras publicadas bajo su nombre entre 1503 y 1505: el Mundus Novus y la Carta a Soderini, que le atribuyen un papel protagonista en el Descubrimiento de América y su identificación como un nuevo continente. Por esta razón, se dice que el cartógrafo Martín Waldseemüller en su mapa de 1507 acuñó el nombre de «América» en su honor como designación para el Nuevo Mundo.
El relato a menudo fantasioso y contradictorio de sus viajes lo han ubicado como una de las figuras más controvertidas de la era de los descubrimientos, debido a una serie infinita de mentidas y desmentidas acerca de la vida y obra del Almirante Vespucio.
Se discute:
- si era autor de sus famosas «cartas» o «narraciones»;
- si realizó todos o alguno de sus viajes,
- si descubrió el Río de la Plata,
- si descubrió las Malvinas…
- Incluso se dice que ni siquiera se llamaba Américo.
Por esa razón hay investigadores que no están de acuerdo con esa historia sobre el nombre de América que nos contaron en la escuela:
LA ETIMOLOGÍA DEL VOCABLO AMÉRICA
En su libro “La Gran Rueda (Una lectura decodificatoria de la Espiritualidad en los Misterios del Antiguo Egipto)”, Julia Calzadilla Núñez establece que el signo jeroglífico MER es uno de los pilares sobre los cuales se fundamenta la teoría que ella plantea acerca del recorrido iniciático en los Misterios egipcios:
“Analizado en toda su polisemia (amor, arado, pirámide), indica que la huella de la voz Mer está presente en numerosos vocablos que en todos los casos apuntan a una elevada espiritualidad:
- Meru, Monte (ver más adelante)
- Mercabah[i], el bíblico carro de Ezequiel
- Ta-Mert, “la tierra bien amada”, uno de los nombres del viejo Egipto”.
VESPUCIO NO DIO SU NOMBRE A AMÉRICA
Calzadilla se pregunta ¿Por qué “mer” no también estaría en América, palabra que no deriva del nombre del navegante y geógrafo italiano “Américo” Vespucio quien, en realidad, se llamaba Alberico?
La creencia generalizada es que fue Vespucio quien dio nombre al continente y que esta denominación se utilizó por primera vez en el siglo XVI, como ya vimos arriba.
AMERRIQUE DE NICARAGUA DIO NOMBRE A AMÉRICA
Autores que así lo establecieron
- Existe una antigua tesis expuesta por Alexander von Humboldt y otros, que pretende demostrar que el verdadero nombre del navegante era «Alberico«, y que tras descubrir en mapas precolombinos que el nuevo continente era llamado Amérika, voz tolteca que significaría «país con montañas en su centro» y “tierra de los vientos fuertes” en Maya-Quiché, cambió su nombre a «Américo» a fin de apropiarse del mérito del «descubrimiento» de este continente. Contrariamente a esta especulación, en su registro oficial de nacimiento su nombre figura como «Amerigho» (pero sabemos que esos datos pudieron haber ser modificados posteriormente).
En 1503 o 1504 apareció impresa en París una obra en latín titulada Mundus Novus que afirmaba ser un resumen traducido de una carta escrita en italiano por «Albericus Vespuccius» desde Lisboa a Lorenzo de Pierfrancesco de Medici.
En 1507 Fracanzio de Montalbodo retradujo al italiano el texto latino (aunque él dice que lo tradujo del español) y tituló su trabajo Paesi novamente retrovati et Novo Mondo da Alberico Vesputio florentino intitulato. Esta versión italiana fue tan popular que Archangelo Madrignano la volvió a traducir al latín y la publicó en Milán en 1508.
- Erich von Däniken, confirma estos datos en Regreso a las Estrellas, Plaza & Janes, S.A. Editores, Barcelona, 1975, pp.141-147.
- Lo anterior es confirmado también por José Steinsleger (Escritor y periodista argentino, que escribe y publica para varios medios del continente), que dice que no solo el nombre América puede ponerse en discusión, igual ocurre con el de Vespucio, que originalmente se llamaba Albérico y lo habría cambiado por el de Américo debido a cierto boom minero (oro) que se dio, en el año 1502, en la Cordillera de Amerrique, en Nicaragua.
Pero lo importante acá no es como se llamaba Américo sino el nombre de América y es precisamente Amerrique (“Tierra de los vientos” en Maya-Quiché), el inicio de un camino que parte de la denominación de una cadena montañosa que es la divisoria de aguas de Nicaragua, cientos de años más tarde se traslada a Américo Vespucio y luego pasa a constituir el nombre de todo el continente que “descubrió” Colón.
- También Jules Marcou, un prominente geólogo francés, al igual que otros autores del Siglo XIX, decía que el nombre de América fue llevado desde este continente a Europa y que Vespucio cambió convenientemente su nombre, reflejando el de su descubrimiento de un pueblo de Nicaragua llamado Amerrique y que esa zona rica en oro fue visitada tanto por Cristóbal Colón, como por Vespucio, quien después dio a conocer ese nombre en Europa.
Para ambos, las palabras Amerrique y oro eran sinónimos. Subsecuentemente, de acuerdo con Marcous, Vespucio cambió su nombre de Alberico a Amerigo.
También dice que en los archivos de Toledo existe una carta de Vespucio al cardenal, fechada el 9 de diciembre de 1508, y firmada Amerrigo, con doble “r”, como en el nombre nativo Amerrique y por lo menos hay otras dos cartas entre 1508 y 1512, año en el que murió Vespucio, firmadas por él como Amerrigo.
- Jan Carew, (El 5 de diciembre de 2012, el escritor guyanés Jan Carew falleció en su casa de Louisville, Kentucky. Tenía 92 años. Uno de los escritores más prominentes de su generación de las Antillas, Carew fue un poeta, dramaturgo, novelista y erudito) pensaba que América no fue nombrada debido a Vespucio, sino viceversa, que Vespucio se re-nombró después de encontrar Amerrique, modificando su nombre, para reflejar la importancia de su descubrimiento.
Para Carew esta verdad que encontró leyendo libros de historia llegó a ser una fuente de ira: “Robar los nombres de países y personas a los naturales de los países conquistados, fue uno de los crueles juegos de los colonizadores, robar los nombres de personas o de pueblos es poner en movimiento un trastorno, que puede a su vez crear una crisis permanente de identidad”.
ROBO DEL NOMBRE E IDENTIDAD
Para subrayar este hecho, el robo del nombre de un lugar importante en el corazón de América y propagar que era el nombre de un diletante, le quita a su nombre original su significado elemental.
¿Y cuál era su significado elemental? Carew hace eco de Marcou, quien cita a su correspondencia con Augustus Le Plongeon, antropólogo estudioso de la cultura maya de Yucatán, quien escribió a Marcou: “El nombre de América o Amerrique significa “tierra de los eternos vientos fuertes” en lengua maya y el sufijo “ique” o Ika” pueden significar no sólo viento o aire, sino también espíritu que respira, la vida misma.
Todo esto hace llegar a Carew a la conclusión de que “Entonces nosotros debemos reclamar el nombre de nuestra América y darle de nuevo su significado primordial: “Tierra del Viento, la fuente del de la vida y el movimiento” Sus aseveraciones acerca del nombre y su origen demanda un escrutinio más profundo, pero eso es algo que definitivamente vale la pena hacer.
EL VOCABLO «MER» DE «PIRÁMIDE» Y «AMÉRICA» Y
MME. BLAVATSKY, ISIS SIN VELO
Regresando a la Lic. Julia Calzadilla Núñez, estudiosa del tema, entre sus interesantes y bien fundadas hipótesis, especifica que “pirámide” incluye el vocablo “Mer”, y menciona que Helena Petrovna Blavatsky, fundadora de la teosofía, en su magistral obra Isis sin Velo, presenta diversos argumentos que fundamentan su criterio de que el nombre América era muy anterior a la época de Vespucio: enlaza esta palabra, América, con la comarca montañosa nicaragüense denominada Americ, Amerrique o Amerique, “que se extiende entre Jucigalpa y Libertad en el departamento de Chontales”, señalando que en “el idioma indígena las terminaciones ic e ique significan grandeza, jefatura y dignidad”, como por ejemplo cacique. Asimismo, apunta que en el relato de su cuarto viaje, Colón cita “el poblado de Cariai (probablemente Cacai) […] situado en la cordillera de Amerrique, a unos 920 metros sobre el nivel del mar”. Y añade: “Sin embargo, Colón omite en su relato la palabra Amerrique”.
Mme. Blavatsky Aclara a continuación que la “denominación Provincia de América apareció por vez primera en un mapa publicado en Basilea el año 1522” y cita a Wilder como corroboración de lo antes expuesto:
“Es muy probable que la cordillera nicaragüense de Amerique (gran montaña como el monte Meru) diese su nombre a todo el continente, pues en caso de habérselo dado Vespucio, seguramente lo derivaría del apellido y no del nombre.
MONTE MERU
Mme. Blavatsky expresa en la citada nota 51 de su Op. Cit, que tal vez algún día el nombre de América ”se vea relacionado con el sagrado monte Meru, que, según la tradición india, se alza en el centro de los siete continentes”.
EL MONTE MERU VENERADO EN MUCHAS RELIGIONES
EN EL TIBET, HIMALAYA
El Monte Kailash en el Tíbet es objeto de veneración pues está considerado como el mítico Monte Meru, eje del mundo y morada de los dioses, como para los griegos era el Monte Olimpo o para los quechua la monaña Cotopaxi.
Los hindúes y budistas consideran el Monte Meru, ubicado en el Himalaya, como la ubicación de Shambala. Es el centro del cosmos, teniendo sus raíces en el infierno y su cumbre en el cielo. El pico de la montaña es el hogar de Indra, el rey de los dioses hindúes.
Los tibetanos consideran que el monte Meru es el mismo monte Kailás (que está ubicado en Tíbet).
OTRAS UBICACIONES DEL MONTE MERU O SUMERU.
el texto Suria siddhānta menciona un monte Meru en medio del planeta Tierra, y otros dos montes —el Sumeru (buen Meru), morada de los dioses en el Polo Norte y el Kumeru (mal Meru), morada de los demonios, en el Polo Sur.
EN EL CENTRO DE LA TIERRA
Meru, el “Olimpo” o “Monte Meru” de los indios nativos americanos, se dice que está situado en el centro de la tierra. Está custodiado por serpientes, que «vigilan la entrada al reino del Conocimiento Secreto».
PASADIZOS SUBTERRÁNEOS Y TÚNELES
El Guardián de la Tierra, Shambala (En el Monte Meru), ha sido descrito como un centro de alimentación principal con centros auxiliares esparcidos por el mundo, unidos por pasadizos subterráneos. Desconocidos para la gente de la superficie viven seres humanos que ‘crearon’ los ‘dioses’.
Más sobre pasadizos o túneles subterráneos en:
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Pero lo importante no es como se llamaba Américo Vespucio sino nuestro continente: América.
Como dijimos antes, su nombre muy probablemente venga de Amerrique, la denominación de una cadena montañosa que es la divisoria de aguas de Nicaragua y que, cientos de años más tarde, pasa a constituir el nombre de todo el continente que supuestamente “descubrió” Cristóbal Colón; en cuyo caso, aunque el nombre nos lo hayan dado los conquistadores, proviene de un vocablo y un lugar netamente de este mismo continente.
Concluyendo, hay muchos indicios de que en realidad el nombre América no viene de Vespucio, sino de nombres que ya existían en el continente, relacionados con el sagrado Monte Meru. Por supuesto que habrá quienes no acepten estas pruebas y sigan creyendo lo que les enseñaron en la escuela acerca del nombre de América y su «descubrimiento», sólo les recuerdo que la historia la escriben los vencedores…
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Imágenes tomadas de internet, Pinterest o de los enlaces relacionados. Creo que no es necesario advertir que algunas fotos, son imágenes actuales, sólo para dar una idea de cómo fueron en aquellos tiempos y lugares.
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© Silvia Eugenia Ruiz Bachiller
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Algunos datos tomados de:
http://www.antiguosastronautas.com/articulos/Calzadilla01.html
http://www.bolinfodecarlos.com.ar/040314_cuba.htm
http://es.wikipedia.org/wiki/Américo_Vespucio
http://www.bibliotecapleyades.net/vida_alien/alien_races11.htm
http://es.wikipedia.org/wiki/Meru
http://ruta40.zoomblog.com/archivo/2006/12/20/
http://es.globalvoicesonline.org/2012/12/19/internautas-despiden-al-escritor-guyanes-jan-carew/
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NOTAS AL PIE DE PÁGINA
[i] Aparece en la Biblia, Ezequiel 1:4-26, para referirse al trono-carroza de Dios, como un vehículo de cuatro ruedas conducido por cuatro Querubines, cada uno de los cuales poseyendo cuatro alas y cuatro caras: de un hombre, un león, un buey y un águila. En el Judaísmo medieval, el comienzo del libro de Ezequiel fue reconocido como el mayor pasaje místico de la Biblia, y sus estudios quedaban en continuo desacuerdo. http://es.wikipedia.org/wiki/Merkaba
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